COMPRAR UNA RADIO – LO QUE HAY QUE TENER EN CUENTA

Estimados Usuarios, esta guía les permitirá revisar algunos aspectos a tener en cuenta al adquirir un receptor de radio preferentemente antiguo para formar una colección de las mismas o para su uso personal.

1) En primer lugar sepa que quiere comprar. Este aspecto es fundamental ya que este elemento usualmente se adquiere por algún tipo de experiencia anterior que Ud ha tenido o algún pariente suyo ha tenido. Verifique si el modelo que ud quiere coincide con el producto que Ud busca. Esto es a fin de realmente sentirse pleno con su nueva adquisición. Pregunte todo hasta lo más mínimo compre o no por internet. Verifique si el no de modelo qe figura en la parte posterior coincide con el chasis.

2) No compre solo «marca», compre performance, es decir buen rendimiento y selectividad, buen sonido y sensibilidad. Hay receptores que cotizan precios siderales, pero a la hora de ponerlos a funcionar no es lo que esperabamos. Por esto mismo, no se deje llevar por marcas solamente evalue: sensibilidad, selectividad, volumen, tono y aspecto general. Pero si colecciona marcas es otro buen cominezo. Si ud es amante de los catologos y subastas de radios de afamadas marcas, es su elección, pero puede formar una bella colección con un modesto presupuesto.

3) Pida al vendedor que le hable de los detalles del receptor. Si el gabinete es de madera (verifique la presencia de xilófagos o la popularmente llamada «polilla». Hay gabinetes que si se pueden rescatar y otros no. Si el gabinete es de catalina o baquelita en todos los casos son recuperables, esto si Ud cuenta con el presupuesto para hacerlo y si la radio que ha conseguido vale la pena para Ud. o es un modelo verdaderamente raro en el mercado. Si el gabinete es de vidrio o de madera prensada: el vidrio se reemplaza, si este es grabado se puede hacer o esperar que aparezca otra radio y reemplazar. Si es madera prensada con algún motivo figurativo o abstracto se puede reproducir. Ahora bien recuerde «no acumular» radios que «más adelante» va a restaurar, no olvide la ley de Murphy, aquello que no se toca en 6 meses no se toca más…de esta forma no perderá dinero y no juntará 6 millones de aparatos que ni usted ni nadie restaurarán. Más bien cambiar una válvula y sentarse a leer un buen libro a esperar que llegue una perillita, la etiqueta, la resistencia, la y la y la y la …

4) Perillas: Se pueden duplicar, pero debe asegurarse que por lo menos hay una para poder hacer esto. Hay algunas perillas que se pueden conseguir, lo ideal es ir armándose de un buen stock de las mismas en subastas, mercado de pulgas, ferias. Camine siempre hay oro a la vuelta de la esquina. Otra opción, siempre que usted no sea un «purista» es reemplazar momentaneamente con perillas de madera en caso de radios «capilla» u otras. Se adaptan bien y estetica y funcionalmente sirven.

4″): Tapa trasera: Puede que falte o que esté rota. La gran mayoría es de contrachapado, terciado o madera prensada, si esta no está se reproduce a mano o por corte laser. Esta serigrafiada? Si Ud es hábil puede realiar una transferencia o utilizar Letraset (si aún lo consigue) o llevar la tapa nueva a un taller de serigrafía, no le cobrarán caro y su modelo quedará nuevo. Procure que los colores sean los adecuados.

5) Válvulas: Hay radios que han sufrido y pasado por numerosas intervenciones, reparaciones, adaptaciones, hasta el punto de dejar de ser valvulares y transformarse en radios transistorizadas. Aquí puede tomar dos desiciones: Adquirir el receptor, no al mismo precio, reemplazar las válvulas sustituidas por las originales, y listo; ó en caso de encontrar un verdadero «frankenstein radial» esbozar una cordial sonrisa, estrechar las manos en un gesto cordial hacia el vendedor y retirarse de allí. Sin embargo, el halcón peregrino posee una vista única y no desaprovecha nada si sale de cacería de repuestos que pude obtener de estos hitos de la invención popular.

6) Asegúrese luego de haber adquirido el receptor de no enchufarlo inmediatamente , domine su ansiedad y hasta podría ser una buena oportunidad para practicar yoga. Antes verifique a que tipo de corriente conectar (DC / AC) y la tensión de corriente (110 volts o 220 volts), Si el cable es con resistencia interna asegúrese que este esté en condiciones. Si Ud es un neófito, busque un técnico adecuado que revise el receptor. Mas vale pájaro en mano que Ud y el receptor volando.

7) Busque bibliografía, catálogos, publicidades antiguas, antiguos programas de radio, audios de radio-teatro, revistas,artículos para ir armando una linda colección arme su bunker de la radio y seguramente tendrá una gran afluencia de publico, incluso si sube su colección a la internet. Haga caso omiso a su esposa, nunca lo entenderá.

8) Si es amante de las radios a galena, receptores de cristal o circuitos valvulares simples Ud puede ampliar su colección con un modesto presupuesto, armando sus propios receptores que van mas allá de la bobina de cartón, un diodo y un audífono. Hay receptores que captan infinidad de estaciones con pocos elementos, pero estos deben ser de alta calidad. Dependiendo de la estación del año, locación, antena, tierra y otros aspectos se puden recepcionar de 4 a 175 estaciones. Si, ha escuchado bien.

9) Por desgracia se perdieron los antiguos radio teatros y otros espectaculos radiales, pero la radio a diferencia de la televisión estimula la imaginación. Imaginese (Y valga la redundancia): como veía Ud a Hector Larrea en su mente, antes de conocerlo en la TV ?

10) Si Ud cree que hoy es su día, no se fué de vacaciones y cobró ese dinero del amigo que ya lo tenía perdido, su colección puede arrancar con elementos simples: colección de válvulas, colección de repuestos, colección de receptores (galena, cristal, valvulas, otros), colección de bibliografía, colección de elementos utilizados en la radiodifusión. En otras palabras comience hoy mismo, y repito su mujer nunca lo comprenderá. Además transmita este hobby a su familia: hijos, nietos, sobrinos y amigos. El «bichito radial» sabe como y cuando morder.

11) La mejor época de difusión de las ondas hertzianas es el otoño/invierno, pero dependerá también de su locación, clima, antena, conexión a tierra y demás (esto en especial con las radios a galena).

Autor: RADIO EDISSON

CÓMO RECONCOER MUEBLES ANTIGUOS

UNICAMENTE SE RECONOCE UN MUEBLE ANTIGUO MIRANDO EL TIPO DE MADERA Y ENCHAPADOS DE LA EPOCA , SE CONCIDERA ANTIGUEDAD A UN MUEBLE CUANDO TIENEN UNOS 100 AÑOS DE VIDA , EL RESTO ES O BIEN DISEÑO DE EPOCA O REPLICA , DE ESOS AÑOS , EN LA ACTUALIDAD SE HACEN MUY BUENAS REPLICAS DE MUEBLES QUE PARECEN ANTIGUOS , TAMBIEN LOS HACIAN EN LOS AÑOS 50 Y SIEMPRE SON DE ALTOS PRECIO.

Autor: ALVICTO

PARA QUÉ USAR HERRAMIENTAS ANTIGUAS

Las viejas herramientas están generando, día a día, mayor interés en el mundo de las antigüedades, como objetos decorativos o de colección.

Debido a la excelente calidad de los materiales utilizados en su fabricación, también están siendo cada vez más apreciadas por hobbistas, restauradores y carpinteros, entre otros, pues son absolutamente confiables a la hora de trabajar con ellas.

Antes de comprar una herramienta vieja o antigua, debemos considerar algunos detalles que nos ayudaran en su elección.

El primero es observar si posee algún sello, marca o grabado, pues esto nos permitirá conocer su procedencia y en consecuencia, saber aproximadamente su antigüedad. Para esto último, es necesario contar con catálogos o información que nos permita ubicarla en el tiempo (por las diferencias en los logotipos, en los modelos, etc.), aunque no necesariamente se debe desechar una pieza que carezca de sello o grabado, si se la busca para trabajo, pues hay muchas que no poseen marcas pero igualmente son de excelente calidad. Para descubrirlas debemos tener cierto conocimiento visual de las características de los materiales.

Tomemos en cuenta que la fabricación de herramientas en serie comienza aproximadamente entre mediados y fines del siglo XIX. Anteriormente era de tipo artesanal.

Otro punto de importancia es el estado en el que se encuentra la herramienta a comprar.  Una cantidad excesiva de óxido o herrumbre hará difícil la recuperación de la pieza.  Partes rotas o faltantes la tornarán inútil para su uso y además, perderá su originalidad y valor si es buscada para colección.

Puede restaurarse, con muy buenos resultados, utilizando repuestos originales. Partes faltantes admiten ser reemplazadas por repuestos no originales. Esto la volverá útil para trabajar pero recuerde que disminuirá su valor de colección.

 

Volviendo a las marcas y procedencias, en la Argentina de fines del siglo XIX y hasta poco después de la segunda guerra mundial, las herramientas se importaban de Europa (principalmente de Alemania y Francia) y Estados Unidos.

 

Hoy nos referiremos a la marca «Stanley» (americana), pionera en la fabricación de herramientas para carpintería y una de las más difundidas gracias a su calidad superior. En la actualidad están bien cotizadas tanto en el mercado nacional como internacional pero, lamentablemente, algunas hoy son muy difíciles, por no decir imposibles, de conseguir en nuestro país. Una de ellas es el cepillo universal de carpintero Stanley Nº 55 y ni hablar si buscamos el Stanley Nº 1.

Un dato para tener en cuenta: Stanley, desde su fundación en 1853 hasta poco más de mediados del siglo XX, fabricó herramientas con varias marcas registradas, siendo todas de alta calidad. Tome nota: «Bailey», «Bed Rock», «Victor», «Zig Zag», «Forty-five», «Fifty-five», «Jersey Vises», «Defiance», «Hurwood», «Odd Jobs», «Atha», «Horseshoe», «Yankee»  y otras, todas Marca Registrada de Stanley Tools  ( Estos datos han sido extraídos de los catálogos Stanley originales de 1914 y 1958 ).

 

Otras marcas norteamericanas de excelente calidad son Millers Falls, Bonney, Goodell Pratt, Sargent, Starrett, Disston…y varias más, de las cuales hablaremos en una futura guía.

 

 

Espero haber dado un pequeño y útil aporte para ampliar el conocimiento en este fascinante mundo de las herramientas antiguas. No olvidemos que estas han sido las que ayudaron al hombre a dar forma a tantos objetos que hoy admiramos por su belleza y calidad.

Autor: PAPEL SEPIA