CÓMO ES LA LACTANCIA EN LOS BEBÉS PREMATUROS

Los prematuros son unos bebés «apurados», que han salido del vientre materno antes de haber completado todo el período gestacional.

Esa «impaciencia» hace que se enfrenten con un medio ambiente hostil, muy diferente del que tienen los recién nacidos normales, formados por incubadoras, respiradores, aparatos de oxígeno, monitores, etc. Y frecuentemente son invadidos en su indefenso cuerpecito por venopunturas, sondas o tubos.

En estas condiciones son particularmente susceptibles de contraer infecciones graves. La mamá juega un rol insustituible, porque posee algo que no puede darle aún la más sofisticada unidad de neonatología: un alimento que lo nutre adecuadamente, pero que además posee anticuerpos y células que lo previenen contra las enfermedades, y hormonas y factores de crecimiento que contribuyen a la maduración de su intestino.

Actualmente hay consenso entre los neonatólogos de que el bebé debe recibir desde el primer día de vida pequeñas cantidades de calostro.

Este alimento, de color amarillo -seguramente porque vale como oro- es la leche de los 3 ó 4 primeros días y contiene específicamente todo lo que el prematuro necesita: aporte de anticuerpos para evitarle infecciones graves y células que van nadando en la leche y se ubican en su intestino, mejorando su sistema inmunitario.

Es un verdadero ?transplante de células?, dado que de la madre pasan a su hijo y quedan allí para enfrentar a los gérmenes.

Además el calostro, mucho más que la leche entera, posee «factores de crecimiento» que estimulan el crecimiento y la maduración del intestino, facilitando su absorción.

1°consejo: El calostro es imprescindible. ¡Su bebé lo debe recibir! Sáquese la leche con la mano (extracción manual) o con bomba extractora, o sacaleche (extracción mecánica) cada tres horas, incluso a la noche. Simulará así el ritmo natural de la lactancia. Pídales ayuda a los médicos y enfermeras para que le enseñen la técnica de extracción. Después de 3 ó 4 días la leche cambia de color y consistencia, transformándose en leche entera, que en la mujer que ha tenido un parto prematuro tiene una composición diferente, con más proteínas y calorías que la que ha completado los 9 meses de embarazo. Esta leche se adapta a los requerimientos aumentados de los bebés pretérmino. Además, contiene más defensas que la leche madura habiéndose comprobado su efecto protector para evitar intercurrencias infecciosas. Otra cosa más: la mamá elabora anticuerpos específicos contra los gérmenes de las maternidades que potencialmente pueden atacar a estos chiquitos.

Hasta hace poco tiempo, los médicos pensaban que los prematuros no podían salir de su incubadora por riesgo a enfriarse, pero hoy sabemos que es favorable para su evolución que sean retirados un ratito y puestos al pecho o en contacto ?piel a piel? con su mamá. Este método de estimulación temprana se llama ?Canguro? y se utiliza ampliamente en el mundo entero, como una forma de favorecer el contacto madre-hijo y la lactancia.

2°consejo: Pida al jefe de Neonatología que le permita tener en brazos y piel a piel a su bebé, manifestándole su deseo de ponerlo cuanto antes al pecho. Una vez estabilizado y cumpliendo las pautas de seguridad de cada servicio, no hay razón científica para evitar estos maravillosos encuentros.

Finalmente, sepa que al ponerlo al pecho, su niño va a reaccionar muy poquito o se va a quedar dormido, que va a necesitar mucha ayuda de las enfermeras y complementos por sonda o un vasito, pero que la mayoría de las mamás de prematuros pueden amamantar a sus hijos.

¡Coraje y paciencia!

Autor: MAMASOLBEBES